Pekín, 16 jun (EFE).- La empresa china de bicicletas compartidas Mobike consiguió 600 millones de dólares (538,3 millones de euros) en su última ronda de financiación para la expansión internacional de un negocio del que es líder en el país asiático, informa hoy el diario South China Morning Post.

Apoyada por el gigante tecnológico Tencent, la firma con sede en Pekín aseguró que esta cifra se trataba de "la mayor ronda de financiación en el sector de bicicletas compartidas en el mundo".

Algunos de los participantes relevantes en esta ronda fueron las entidades financieras ICBC -el mayor banco del mundo por volumen de activos- y el Banco de Comunicaciones, así como la firma de gestión de patrimonio Farallon Capital.

Estos 600 millones de dólares se unen a los 300 millones (269,2 millones de euros) que la sociedad consiguió el pasado mes de febrero, con lo que la financiación conseguida en 2017 asciende ya a unos 900 millones de dólares (807,6 millones de euros).

Mobike, que actualmente cuenta con una flota de más de 5 millones de bicicletas y procesa más de 20 millones de operaciones diarias, se ha marcado como objetivo "estar en 200 ciudades antes de que termine el año", según explicó su consejero delegado y cofundador, Davis Wang.

No parece una meta descabellada si se tiene en cuenta que la compañía fue fundada en abril de 2016 en Shanghái y ya opera en un centenar de ciudades, entre las que figuran algunas en el extranjero como Singapur o Mánchester y Salford, en el Reino Unido.

La compañía se encuentra inmersa en una batalla por conseguir financiación con su mayor rival, Ofo, que el pasado mes de diciembre decidió exportar este modelo de negocio a Estados Unidos y Reino Unido.

Ambas compañías revolucionaron el sector del préstamo de bicicletas hace un año al incluir la posibilidad de que el usuario aparque el vehículo prácticamente en cualquier lugar de su ciudad, y no en puntos designados previamente por el ayuntamiento o los gestores de estos negocios.

Así, cuando el usuario ve una bicicleta libre o la encuentra a través de una aplicación en el teléfono móvil, la desbloquea y puede alquilarla por el tiempo necesario y dejarla después al llegar a su destino. Cada bicicleta está equipada con un GPS para que pueda ser localizada en el caso de pérdida o robo.