Fráncfort (Alemania) 21 mar .- El fabricante automovilístico alemán BMW, que agrupa las marcas BMW, Mini y Rolls-Royce, prevé lograr este año nuevas cifras récords de ventas, ingresos y beneficios de impuestos, según dijo el presidente de su junta directiva, Harald Krüger, al presentar el balance de 2016.

Krüger destacó en rueda de prensa que en 2017 BMW quiere vender 100.000 vehículos eléctricos y que en 2025 los modelos eléctricos e híbridos representarán entre el 15 y el 25 % de las ventas.

"Esto significa la electrificación de todas las marcas del grupo BMW y series de modelos. Nuestro objetivo es la movilidad sostenible", añadió Krüger.

El grupo BMW batió en 2016 un récord de ventas, por sexto año consecutivo, con 2.367.603 unidades vendidas, un 5,3 % más que en 2015.

De ellas 62.000 unidades fueron modelos eléctricos, lo que supone un 2,6 % de las ventas del grupo.

Krüger prevé que va a aumentar significativamente la demanda de movilidad eléctrica la próxima década, en algunos mercados, impulsada por la regulación.

BMW también quiere mantener un margen de rentabilidad operativa en el segmento automovilístico de entre el 8 y el 10 %, considerando que "las condiciones políticas y económicas no cambiarán significativamente", aunque reconoce que existe incertidumbre.

El grupo BMW vendió en 2016 en Europa más de un millón de vehículos de las marcas BMW y Mini, un 9,2 % más.

Asimismo, las ventas en China mejoraron un 11,3 %, hasta 516.355 unidades, por lo que por primera vez vendió más de medio millón de vehículos BMW y Mini en un año en China.

El grupo BMW vendió en EEUU 365.204 unidades, un 9,7 % menos, mientras que en México entregó 34.670 unidades, un 15,4 % más.

Las ventas de su competidor Daimler crecieron en este periodo un 5 %, hasta 2.998.386 vehículos.

Mercedes-Benz Cars y Mercedes-Benz Van registraron los aumentos de las ventas más altos, del 10 y 12 % respectivamente, en el primer caso por el éxito de modelos todocamino, que son los modelos preferidos en EEUU.

El presidente de EEUU, Donald Trump, amenazó a BMW con unas tasas arancelarias del 35 % si produce en México y no en EEUU.

Por ello BMW va a invertir en programas de formación de empleados en nuevas tecnologías en su planta en Spartanburg, donde emplea a 9.000 personas, pero mantiene sus planes en México.

El acuerdo comercial NAFTA entre EEUU, México y Canadá permite a BMW y otras empresas exportar de forma barata mercancías de México a EEUU pero la nueva Administración estadounidense quiere revisar el acuerdo.   (EFE)